Según reza la tradición Paterna fue un pueblo en el que los Moros y Cristianos no llegaron a desarrollar un conflicto bélico, sino un entendimiento que les igualó en derechos y obligaciones bajo el mandato y la protección del Rey Jaime I. Así pudo ser, y así año tras año se escenifica a las puertas del Palacio del Ayuntamiento, poniendo el punto y final a los festejos de Moros y Cristianos que se han desarrollado desde el pasado jueves.
Un año más los comparseros Amado Rubio, Enrique Montaner y José Miguel Ten desarrollaron los papeles principales de Caid Moro, Artal de Luna y Alferez Moro, acompañados por Eladio Fernández en el papel de Rey Jaume I y Lidia Martinez como Na Violant d’Hungria. Como cada año la plaza Ingeniero Castells quedó abarrotada de comparseros que vestidos con las indumentarias propias de la Fiesta, atendieron la interpretación del acto.