Me van a permitir que aunque este periódico salga hoy 17 de Febrero a la calle les hable de una celebración ya pasada pero de la que aún se habla. San Valentín, día de los enamorados.
Recuerdo que el martes pasado, día de San Valentín, me vino a la memoria mis principios en estas lides. Trabajaba yo en Radio Popular y ese día no cabían todas las dedicatorias. Era imposible. Novios, novias, proyectos de amor, amores rotos, maridos, esposas…. Era un sinfín de mensajes. Recuerdo que la mayoría eran de chicos que le dedicaban la canción a sus chicas que trabajaban en un taller, o en una tienda, o en una oficina o dónde fuera. Por experiencia sé que las chicas por una parte se alegraban, y por otra pasaban su ratito de vergüenza delante de sus compañeros de trabajo. Hoy en día se echa de menos esos momentos y la nerviosa y gran duda de si la destinataria había escuchado la canción o no, si en ese justo momento ella estaría junto al “transistor”. Hoy el Facebook lo resuelve pronto, pero no es lo mismo.
Bueno, el tiempo pasa y los tiempos cambian. Las situaciones son diferentes o lo van siendo con el paso de los años. En el trabajo, en el amor, en las costumbres. Hoy estás aquí y mañana allí. Lo importante es lo que seas y cómo actúes allí donde estés. Los tiempos cambian irremediablemente. Las personas no tienen porqué. Por cierto, ¡Felicidades a todos los enamorados que me han leído!. Les veo.