A pesar del frío, más de 200 corredores se han animado a participar en la I San Silvestre de Paterna. Una carrera popular en la que los participantes han acudido disfrazados para la ocasión, en su gran mayoría de Papá Noeles y de temas relacionados con la Navidad, pero en la que la solidaridad era lo más importante, ya que cada participante ha entregado a Caritas lotes de comida que se repartirán entre los vecinos más necesitados.
El buen humor ha recorrido 3 kilómetros 600 metros en dos vueltas consecutivas por un circuito que se había preparado por la calle Ramón Ramia Querol, frente a la Torre, y la avenida de Europa. Tras la carrera, que no tenía carácter competitivo, sino lúdico, los corredores han podido tomar un chocolate caliente para recuperar fuerzas.
En la carrera han participado grandes y pequeños, algunos de ellos en carrito, e incluso algunos perros que también iban ataviados para la ocasión. Era el caso de Rufi, que como sus dueños, iba vestida de Mamá Noel.
Además de los tradicionales Papá Noeles, también había un cocodrilo gigante, un troncomóvil de los picapiedra o un Astérix, que han recibido el premio a los mejores disfraces. En los niños ha destacado el disfraz de un zombi, un pollo y una pequeña muñeca de trapo.
Los Servicios Deportivos Municipales, junto con el club de atletismo Cárnicas Serrano, han organizado por primera vez esta carrera que se quiere consolidar como una cita indispensable en la localidad durante las fechas navideñas.
