El portavoz de Esquerra Unida en el Ayuntamiento de Paterna, Javier Parra, ha lamentado la utilización torticera por parte del Partido Popular del informe del Cronista de la Villa referido a los cuadros de los alcaldes franquistas. Parra señala que el Cronista de la Villa, Camilo Segura, aconseja que todos los cuadros «estén en el mismo lugar», no que no deban retirarse del salón de plenos. «El lugar oportuno para los cuadros quizá sea un museo, no el salón de plenos de una institución que pretende ser democrática», aseguró Parra.
Parra lamentó la bochornosa actitud antidemocratica de quienes desean que los alcaldes de la dictadura sean expuestos en el salón de plenos del Ayuntamiento y aseguró que los cuadros no volverán al salón de plenos excepto si se hace vulnerando acuerdos plenarios o incluso la Ley de Memoria Histórica, lo cual tendría consecuencias.
Además, Parra reveló que ayer fue conocedor de una carta enviada al alcalde y al resto de grupos políticos por la junta directiva de ASIVALCO (la Asociación de empresas del Polígono Industrial Fuente del Jarro) rechazando el acuerdo plenario del 25 de noviembre de la retirada de los alcaldes franquistas, entre otros de Gerardo Salvador. «Es comprensible el enfado de algunos empresarios, porque algunos hicieron su riqueza gracias al régimen franquista», señaló Parra, quien les aconsejó que» dejen de meterse en asuntos que no les competen, y que si quieren cuadros de alcaldes franquistas que los pongan en sus casas», aunque les recomendó «que en lugar de eso deberían preocuparse más por garantizar los derechos laborales de los trabajadores que les dan de comer».
Por último, el portavoz de EU consideró que son necesarias unas disculpas por parte de quienes han manipulado el informe del Cronista de la Villa hacia este, que durante muchos años ha demostrado su profesionalidad y su rigor, y que en el día de hoy ha sido victima del juego sucio de algunos.
Tan democrático es dejar los retratos en el Salón de Plenos, como en otro lugar del ayuntamiento, o fuera de él, como en una dependencia dedicada a la historia cultural del pueblo, por ejemplo. Ese pueblo tiene derecho a ver a sus representantes políticos, sea de la ideología que sea.
Mejor ponemos el de Carrillo, que lastima que no os hayais quedado fuera del ayuntamiento.